El proyecto consiste en una residencia de una planta en un terreno de 1500 m² en La Providencia, Canning. Se destaca la sobriedad en el diseño, con una clara distinción entre las áreas social y privada, marcada por juegos de losas y cambios de nivel. La zona social incluye sala de estar, comedor, cocina, y una amplia galería en voladizo de 5 metros. Elementos como la piscina y un sector «chill-out» complementan el espacio, mientras que la estructura se apoya en vigas invertidas. Predominan materiales como hormigón, madera y piedra, combinados para crear un estilo elegante y funcional.